¿PUEDES HACER PARTE DE UNA RED DE TURISMO RESPONSABLE?

Viajar es una de las experiencias más placenteras de la vida, es un fenómeno social de mayor valor para las nuevas generaciones, que significa tener un pasaporte a la felicidad, pero debemos utilizarlo con total responsabilidad para preservar cada lugar que visitamos, con el objetivo de permitir a otros el goce de los privilegios que se promueven en el destino.
El ecoturismo es pues una invitación a hacer viajes conscientes, siendo consecuentes con la protección de las riquezas de cada cultura explorada, inmersos en el deseo de ayudar a conservar cada hábitat y ecosistema, ejecutando buenas prácticas con el medio ambiente y promoviendo una actividad turística sostenible.
Las riquezas naturales proporcionan alistamientos excepcionales en formas, colores y especies, las cuales a su vez nos permiten lograr ser unos ecoturistas intachables con actos que aseguren la subsistencia de la ecología o relación de los seres vivos entre sí con el medio en el que viven.
¿SERE RESPONSABLE SOLO CON PONER LA BASURA EN EL LUGAR ADECUADO?
No se trata simplemente de pensar que soy responsable si pongo la basura en su lugar no, o si con mis actos maltrato o no la fauna y la flora; debemos ir más allá en cada posibilidad de aportar positivamente en todo lo que hacemos y en enseñar a quienes conviven con nosotros estos ejemplos de conservación.
El encuentro con la cultura, las tradiciones e idiosincracia en cada travesía debe significarnos una forma de aprender, tolerar y cultivar el orden de las cosas sin causar daños, por ejemplo:

• Participar de la calidad paisajística y ambiental prolongando la biodiversidad de cada hábitat.  Toma tus fotos con responsabilidad sin maltratar los animales, espacios, personas u objetos y pide permiso si es necesario.

• Conocer y valorar la historia de la región conservando su cultura, museos, arquitectura, tecnología, sistema de transporte y demás medios que dispongan para enseñarnos su evolución.

• Dar valor a los ecosistemas naturales, la naturaleza siempre será sinónimo de vida.

• Adquirir los productos y servicios locales dándonos la oportunidad de nuevas experiencias que se pueden disfrutar en platos, bebidas y artesanías.

• Disminuir la generación de residuos y en caso de generarlos hacer una adecuada disposición final de los mismos.

• Hacer uso racional de los recursos naturales, así aportas a la conservación del medio ambiente.

Este es pues un llamado a comportarnos responsablemente en cada viaje emprendido. 
¡Así como cada gota puede conformar un río y éste llegar al océano sin perturbar todo cuanto hay a su paso, así mismo debemos dejar nuestra mejor huella sin perturbar los sitios que visitamos!

 

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